Unidos hace honor a su nombre

El alivio de la pandemia en Honduras trajo una ventana de oportunidad para la programación de seguridad ciudadana de USAID a finales del 2021, y el proyecto Unidos por la Justicia aprovechó esta oportunidad para trabajar con líderes locales y organizar la primera feria de servicio comunitario del proyecto en dos años.

La respuesta al evento del 10 de diciembre, programado para coincidir con el Día Internacional de los Derechos Humanos, fue tan entusiasta como impresionante en su alcance. Aproximadamente 250 residentes locales y 100 representantes de proveedores de servicios del gobierno, en su mayoría hondureños, se presentaron en la cancha de fútbol del barrio Alfonso Lacayo en el sector Rivera Hernández de San Pedro Sula.

“Somos tejedores en Unidos, reuniendo a distintas organizaciones de la sociedad civil, del sector justicia, incluyendo el Poder Judicial, el Ministerio Público y la policía, para lograr una sociedad más justa y segura”, dijo la Directora de Unidos, Caterina Valero.

La programación de seguridad ciudadana de Unidos está firmemente arraigada en el tejido social de las 30 comunidades urbanas marginadas donde opera el proyecto. La feria de servicios fue copatrocinada por el Comité Pro-Desarrollo del sector Rivera Hernández y atrajo el apoyo de redes locales de mujeres y grupos de jóvenes. Esas fuerzas locales se unieron a las instituciones para involucrar a los residentes en actividades que incluyeron charlas con mujeres y niños sobre su derecho a una vida libre de violencia. También se presentó información sobre salud, servicio de energía eléctrica, acceso a la justicia, consejería legal y psicológica para sobrevivientes de violencia, generación de capacidades laborales y oportunidades de empleo, prevención de riesgos asociados a la migración irregular y, por supuesto, recreación.

Con la llegada de la variante Ómicron de COVID-19 a fines de diciembre, se cerró la ventana de oportunidad para grandes reuniones. Pero Unidos y la Policía Nacional (PN) habían demostrado a lo largo de 2021 que son capaces de reunir a muchos de esos mismos socios en apoyo de actividades policiales comunitarias virtuales, realizadas en línea.

Con el apoyo de Unidos, la PN trabajó con ciudadanos de 30 colonias urbanas plagadas de presencia de pandillas y altos índices de criminalidad para desarrollar en conjunto 27 Planes de Acción Comunitaria (PAC). La implementación del PAC en 2021 implicó 318 actividades, su mayoría en línea, que atrajeron la participación de 3,902 residentes. La mayoría de esos participantes eran jóvenes considerados en riesgo de migración irregular, y Unidos capacitó a la policía para integrar dentro de sus actividades las lecciones de un conjunto de herramientas pedagógicas desarrolladas por la Organización Internacional para las Migraciones.

Los PAC también prescribieron operativos policiales, y la policía incrementó los patrullajes y retenes en las áreas problemáticas identificadas por los líderes comunitarios. Unidos facilitó la coordinación con los funcionarios del Departamento de Justicia Municipal, en operaciones conjuntas, para verificar las licencias de licor y evitar que las empresas vendieran alcohol a menores, o después del horario de cierre obligatorio. La policía y los líderes comunitarios distribuyeron carteles y volantes diseñados y provistos por Unidos, que promueven el cumplimiento de las medidas de bioseguridad y la policía transmitió los mensajes de prevención, grabados profesionalmente, del proyecto desde megáfonos provistos por Unidos durante los patrullajes en movimiento lento. También movilizaron grupos de jóvenes para llevar a cabo un número limitado de actividades al aire libre, como campañas de recolección de basura y limpieza de cunetas, y canales de drenaje para mitigar el riesgo de inundaciones.

La oficial Greisy Martínez, quien dirige las actividades de policía comunitaria en la ciudad de La Ceiba, dijo que el proceso de los PAC “nos ha hecho más efectivos en términos de nuestras relaciones y nuestras comunicaciones. Lo importante es que los ciudadanos, por el PAC que estamos implementando, sientan que pueden denunciar los delitos.” Karla, líder comunitaria de esa ciudad, reconoce que “no hemos tenido una cultura de denunciar” en la policía y agrega que el proceso de los PAC estaba ayudando a cambiar esa mentalidad.

María, miembro de la red de mujeres de la Rivera Hernández, dijo que el proceso de los PAC ha mejorado la capacidad de respuesta de la policía a las preocupaciones de los ciudadanos de su comunidad. “Con el PAC hemos podido conseguir más patrullajes y mejorar la seguridad. Sus patrullajes han aumentado mucho y realmente ha tenido un impacto porque el nivel de violencia ha bajado significativamente”.

Para mejorar la implementación del PAC, Unidos facilitó asociaciones entre la policía y las agencias, y organizaciones que aportaron una variedad de conocimientos y experiencias a las comunidades. Ese proceso que permitió a la PN establecer relaciones de trabajo que perdurarán una vez finalizado el proyecto, asegurando la mejora sostenible de la implementación por parte de la PN del Modelo de Servicio Nacional de Policía Comunitaria.

La policía y los oradores invitados del programa nacional Ciudad Mujer y los fiscales que manejan las denuncias de violencia doméstica brindaron educación sobre la violencia basada en género (VBG) a los grupos de mujeres. El programa de Educación y Capacitación para la Resistencia a las Pandillas (G.R.E.A.T. por sus siglas en inglés) de la PN realizó charlas en línea para niños y jóvenes que mezclaron mensajes de prevención y actividades lúdicas. La PN y el Instituto Hondureño para la Prevención del Alcoholismo, Drogodependencia y Farmacodependencia (IHADFA) realizaron talleres para adolescentes sobre las consecuencias psicológicas y físicas del abuso de sustancias y el riesgo de violencia asociado a la compra y venta de drogas ilegales. Los psicólogos de Ciudad Mujer abordaron temas como el embarazo adolescente, los valores familiares y la prevención del consumo de alcohol y drogas. Psicólogas y trabajadoras sociales de Ciudad Mujer dirigieron charlas para jóvenes sobre autoestima y autocuidado. Involucraron a adolescentes en conversaciones sobre salud sexual, noviazgo, embarazo adolescente y violencia en las relaciones y en el hogar.

En el último trimestre de 2021, la PN agregó formación profesional a la mezcla con el apoyo de Ciudad Mujer y el Centro Asesor para el Desarrollo de Recursos Humanos (CADEHR). Implementaron cursos cortos en la colonia San Miguel de Tegucigalpa, y enseñaron a 47 jóvenes los conceptos básicos de reparación de celulares y motocicletas. La PN cuenta con su propio establo de peluqueros capacitados, y realizaron cursos de barbería para 45 jóvenes en las colonias Altos de Los Pinos y Villa Nueva de Tegucigalpa. Los cursos cortos se enfocaron en habilidades que tienen una gran demanda en los vecindarios de enfoque de Unidos, brindando habilidades a los jóvenes para que pueden tener oportunidades económicas cerca de casa.

“Con la policía y Unidos por la Justicia hemos podido rescatar a los jóvenes a través de cursos y capacitaciones que les permiten aprender y vivir su vida de manera saludable”, dijo Marlon Sierra, presidente del Consejo Comunitario de la colonia San Miguel. Zenia, una mujer joven que participó en la capacitación, dijo que estaba orgullosa de aprender sobre mecánica de motocicletas y agregó que “las mujeres no tienen muchas oportunidades en estos días.

“Ahora no sólo manejo mi motocicleta, dijo Zenia. Ahora, si se descompone, puedo arreglarla en cinco minutos y estoy de regreso en la carretera”.